09/09/2014. Yo no quería ser Cerati, yo bancaba a Luca. No sé
bien porque, o más bien no puedo expresarlo completamente, pero cuando me
empezaba a formar en la música yo solía putear a Soda Stereo por “pseudo punkito de Belgrano” (y a veces también a Virus, G.I.T y toda la movida). Siempre
me atrajo más el mundo bizarro y contracultural creado, en primer grado por
Luca Prodan y Sumo, y en cierto nivel por Los Redondos.
Eso nunca tuvo mucho sentido, y no solo porque yo haya vivido
en Belgrano o porque nunca fui a una misa ricotera, sino porque hablando de
influencias musicales, y comparando sonidos, lo que hizo Cerati es mucho más
cercano a mí que Luca o el Indio. Pero imagino, me entusiasmó más el personaje
de Luca y la mística ricotera y obvie otras cosas.
Pasado el tiempo hice algo más racional y me dedique a
escuchar Soda y los discos solistas de Gustavo. Me di cuenta que había cosas
grosas detrás del trio que tanto rompía las bolas con Música Ligera sonando en
La Mega todos los días. Hombre Al Agua, La Cúpula, Pulsar… eran cosas grosas
innegablemente, y más que eso, cercanas a “mi sonido”.
Por eso y sin ánimos de hacer más larga esta katarsis, pude
tener el gusto de disfrutar la música de este tipo antes de que partiera y
darme cuenta que teníamos una cosmovisión muy similar en lo que simplemente a
música se refiere.
Aunque no me sentí tocado como con la muerte de un ser
querido, ni mucho menos el vacío que sentí con la muerte del Flaco, de verdad
puedo decir orgulloso que me gusta lo que hizo el señor Cerati.
Mis Respetos Gustavo.
Nicolás Salvi
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