26/10/2014. Si hace 10 años uno viajaba al balneario termal más importante del cono sur, se encontraba una ciudad que más que destacarse por sus aguas curativas, lo hacía por ser una localidad que brillaba por su pasado, contando con grandes emprendimientos cuasi abandonados y otros en condiciones paupérrimas. La obra pública era casi tan inexistente como la inversión privada, y “Las Termas de Río Hondo” parecía ser solo un lugar de paso hacia la creciente Salta o un mero lugar de descanso para jubilados de los sectores medios-bajos.
No obstante, desde hace 9 años Las Termas vive un fenómeno único en el Noroeste Argentino de crecimiento guiado por el Estado Provincial, que ha hecho de la ciudad “vintage y abandonada” un emblema del desarrollismo que propugna el discurso de la década y a imponerse de nuevo como el destino turístico más importante del Norte ¿Por qué?
Las Termas Hoy
Además del Dique Frontal, emblema de la ciudad, inaugurado en 1967 pocas son las obras que hacían destacar a esta ciudad por sobre las demás en el país. El punto de diferenciación fueron siempre sus aguas termales-curativas, las cuales se encuentran debajo de prácticamente todo el departamento Río Hondo en forma de napas (tanto saladas como dulces), convirtiéndola en una de las pocas ciudades termales de todo el mundo.
Para ponerlo en términos simples, prácticamente cualquier persona puede realizar un agujero y obtener agua termal muy fácilmente. Este recurso natural hizo que proliferen hoteles spa a lo largo de los años 60s, pero el casi nulo acompañamiento estatal del Juarismo y los gobiernos militares, fueron quizás los causantes de que Las Termas no pueda entrar en el podio de los grandes centros turísticos del país junto a Mar del Plata y Bariloche.
A partir de que el radical K Gerardo Zamora asumiera el gobierno de Santiago del Estero en 2005, las obras públicas se transformaron en el foco de las políticas turísticas de la ciudad, cambiando de paradigma totalmente. Son ya varios los mega emprendimientos, comenzando con las remodelaciones totales del Parque Güemes, de la costanera del Río Dulce adornada con palmeras y nodos de descanso, y del Centro Cultural San Martin; un aeropuerto internacional; y el ya proverbial Autódromo, uno de los circuitos más importantes de Latinoamérica, al cual ya se le sumo un gran museo y un hotel de lujo a su predio.
A la inversión pública directa se le suma otra indirecta, que a través de subsidios de desarrollo industrial presta su ayuda a grandes cadenas hoteleras que paulatinamente se instalan en la localidad, destacándose el Hotel Amerian de cinco estrellas.
De esta forma, Las Termas pasó de ser receptiva de congresos de Asociaciones de Jubilados a recibir al Moto GP en 2014 (la competencia internacional de motociclismo más importante del mundo), albergando turistas de todo el mundo y logrando el objetivo de la gestión: imponer el destino en el mapa mundial.
El gobierno
Tratar de entender este crecimiento sin comprender que pasó en la provincia en la última década sería un sinsentido.
Santiago del Estero vivió desde 1948 una sucesión de gobiernos en los que si el caudillo peronista Carlos Arturo Juárez no era la figura central, lo era el Ejército Argentino en sus distintos golpes de Estado. Como dijimos antes, en ninguna de esas gestiones se planteaba el desarrollismo o progresismo como matrices de gobierno, sino más bien a la centralización de la economía en los servicios de un Estado que no tenía un plan real de crecimiento provincial. Nada muy distinto a los demás gobiernos regionales vecinos.
Fue luego de la intervención federal que Néstor Kirchner realizara a “Nina” Juarez, esposa del caudillo y gobernadora en ejercicio en 2004, que comenzó a cambiar la historia de la provincia. La intervención duró un año, y luego de la misma, sería un radical quien asumiría: el intendente de la ciudad capital, Gerardo Zamora.
Zamora, nacido en 1964, abogado por la Universidad Católica de Santiago del Estero, antaño militante de Franja Morada y dirigente de la Juventud Radical, fue una de las figuras más importantes del radicalismo santiagueño desde la segunda mitad de los 90s. Fue también uno de los primeros en unirse a la transversalidad propuesta por Kirchner, adhiriéndose al grupo de los “Radicales K” junto al mendocino Julio Cobos o el rionegrino Miguel Saiz.
Zamora asumió desde un comienzo por su partido, el “Frente Cívico”, hoy insignia de la política santiagueña. A partir de su alianza con el gobierno nacional peronista fue expulsado de la UCR junto a muchos de sus “correligionarios”.
Pero la construcción política que el joven gobernador pretendía, era más grande que la de ser representante de una facción radical disidente. Zamora logró el apoyo casi desde sus inicios con Bases Peronistas, el partido liderado por José Emilio “Pichón” Neder (actual vicegobernador), consiguiendo heredar a todas las redes de operadores políticos que otrora militaran sectorialmente en toda la provincia por el Dr. Juárez.
Otro aliado importante es el Grupo Ick, el grupo económico más importante de la provincia, dueño de un vasto conglomerado de medios de comunicación de la provincia, entidades financieras y servicios de los más relevantes en la vida de los santiagueños. Un pilar sin dudas fundamental en la construcción del poderío estratégico del gobernador.
Así fue que Zamora logró superar a Juárez en el poder político real. Sumó a las grandes huestes de operadores que el juarismo tenía en la provincia, a la ciudad capital y muchos de sus sectores intelectuales, anteriormente opositores a los gobiernos provinciales. Con la mayoría del radicalismo y el peronismo de su lado, más el apoyo de un gobierno nacional que gozaba de una gran cantidad de fondos para inyectar, el Frente Cívico-Bases Peronistas tenía las condiciones que ningún gobierno juarista tuvo.
Es más, hasta el día de hoy, es tal la legitimación de esta alianza, que en la mayoría de los municipios tienen intendentes leales al Frente Cívico, sean peronistas o radicales. Solo se exceptúan La Banda (gobernada por el Movimiento Viable del antizamorista Eduardo “Chabay” Ruiz, hoy aliado al Frente Renovador de Sergio Massa) y Pinto (con el radical Emilio Rached, antes vicegobernador de Zamora, hoy leal a UNEN).
En Las Termas, durante el gobierno de Zamora se dieron también gobiernos radicales del Frente cívico, primero Luis Sáleme y luego Miguel Roberto “Gody” Mukdise (reelecto este año para un nuevo periodo).
Teniendo tan fuertes las bases de su poder, Zamora propuso un plan para desarrollar a través de la gran cantidad de fondos nacionales que ha recibido desde se asunción a los dos centros urbanos más relevantes del territorio de su provincia: Santiago del Estero capital, y Las Termas de Río Hondo
En el municipio capital, hasta el día de hoy se siguen renovando los edificios de los ministerios y demás oficinas públicas, se construyó una terminal de ómnibus a todo trapo y un fórum de conferencias de características internacionales, entre otros mega proyectos.
En Las Termas ya enumeramos las obras más relevantes. La ciudad termal es sin duda uno de los puntos más importantes para el proyecto zamorista, es la carta de presentación ideal que el gobierno quiere imponer: un centro turístico moderno capaz de demostrar que Santiago del Estero quiere dejar atrás su pasado de pobreza y precariedad.
Es por esto que el zamorismo se ha concentrado más que nada en estos dos centros urbanos, canalizadores de las inversiones nacionales, y dejándose de lado a toda una provincia que aunque no se encuentra en las paupérrimas condiciones que supo estar, no ha tenido el crecimiento exponencial que presentas los dos gigantes del centro oeste santiagueño.
Segregación y elefantes blancos
Vemos como para los dos gobiernos de Gerardo Zamora (2005-2013) como para el actual Claudia Ledesma Abdala de Zamora (esposa del ex gobernador), Las Termas de Río Hondo es un punto clave de su gestión, y cualquier caída en el éxito turístico y de desarrollo de tal destino, podría percibirse como una debilidad y caída del propio gobierno provincial.
Los peligros claros en estos fenómenos de crecimiento extraordinario están presentes aunque todavía no muy claros. Se teme claro está, que la estructura de Las Termas no resista y no logre los objetivos de atraer turistas de todo el mundo como se propone, y pronto el aeropuerto (que se encuentra a unos 60 km del de Santiago del Estero y 80 del de Tucumán) quede en desuso al igual que el gigantesco autódromo si no consigue afianzarse como un punto fijo para el Moto GP luego de 2016 (fechas hasta la que se tiene contrato), y que los grandes hoteles cierren.
Y más allá del posible éxito, y que no se den fenómenos de elefantes blancos, el otro problema es cómo adaptar a toda la periferia de la ciudad (recordemos, Las Termas cuenta hoy con casi 50.000 habitantes) y la posible inmigración interna que se puede dar a la misma, para evitar los problemas de segregación que viven cada vez en mayor medida Mar del Plata y Bariloche. Son por eso grandes los movimientos de los propios termeños que piden no solo infraestructura turística, sino también obras para los propios ciudadanos, siendo los pedidos por mayores gestiones en salud los más expuestos.
Lo que vendrá
El futuro de la ciudad seguramente estará marcado por el devenir de las elecciones presidenciales del 2015. Gerardo Zamora, uno de los funcionarios más importantes dentro del kirchnerismo, ‘sirve’ hoy como presidente provisional de la Cámara de Senadores Nacionales. Su esposa ha comenzado su carrera política prácticamente desde el año pasado, y él es aún la figura más relevante en la política provincial.
Habrá que ver cómo se mueve el peronismo provincial ante los cambios nacionales, donde sería una sorpresa que el sector de Bases Peronistas, del vicegobernador Pichón Neder, no plantee su aspiración de ser conducción del gobierno provincial en las próximos comicios. Para el kirchnerismo, Santiago del Estero tiene una importancia sustancial, muestra de ello lo representan la intención de convertir a la provincia en sede de la Capital Federal y la reciente intervención del Partido Justicialista provincial, nombrándose interventor al diputado nacional K Carlos Kunkel.
La pregunta que todos se hacen a esta altura es si habrá un futuro similar en Termas y en todo Santiago sin kirchnerismo o si los víveres serán cortados, lo que explica los altos indicies de aprobación para con el gobierno nacional que existen en la provincia, no solo fogoneados por las obras, sino por el temor al porvenir.
En síntesis, si Las Termas será unas Vegas local o será lo que fue para jubilados de antaño…
Por Nicolás Salvi
Fuente: 1966 Revista
Posted in: Política
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